Problemas.

Para una persona con depresión, las cosas más simples merecen un gran reconocimiento porque llevaron un gran esfuerzo. A una persona con depresión no se le dice "levantate de la cama, hace algo de tu vida, y vas a estar mejor". Quizás no puede siquiera moverse.
‪Para una persona con problemas de autoestima, el mundo se vuelve un monstruo, que genera mucho miedo. A una persona que no se siente segura en su propio cuerpo debido a su baja autoestima no se le dice "¿Por qué no te dejás de joder? Ponete lo que sea y salgamos".
‪Para una persona con ansiedad, todo genera inestabilidad y unos nervios horribles. A una persona con ansiedad no se le dice "¿Qué te pasa? Es salir un rato nada más".
‪Para una persona con ataques de pánico, la vida se torna incontrolable. A una persona con ataques de pánico no se le dice "no te pongas nerviosa, tranquilizate".
‪Para una persona con problemas de alimentación, lo más básico y simple de la vida se vuelve un enemigo. A una persona con problemas alimenticios no se le dice "comé y no hagas boludeces".

‪El cuerpo se enferma.

‪Y la cabeza se enferma.

‪La vida puede dejar de ser simple si la cabeza se enferma.
Que no lo veas no significa que no importe.
‪Que no te pase no significa que no exista.

Fuente: http://soliannaci3.blogspot.com/2017/01/blog-post_30.html